Muchas gracias por el envío. Es un importante aporte. Leo bastante sobre podcast y monetización y cada vez más me voy formando la idea que son modelos poco aplicables a la Argentina. Veo canales y podcast de otros países y allí si parece funcionar la monetización, no asi en nuestro país.
Octavio, gracias por leer. No creas, en realidad en el mercado en español el modelo de monetización no tiene desarrollo. Es verdad que Argentina es un caso también particular por su situación económica, pero en países con estabilidad tampoco se ha generado un mercado.
El año pasado, en España, el podcast sólo generó €10 millones en todo el año, frente de los u$s2.400 millones que se generaron en EEUU.
Precisamente creemos que ya no se trata tanto de hablar de podcasting y todas sus bondades, su capacidad de prescripción, las comunidades... se trata de vender, de salir al mercado y demostrar que puede haber industria.
El riesgo de no hacerlo es que el podcasting quede como un producto pequeño, marginal y para románticos del audio. No se puede renunciar a la idea de sacar músculo, de presentar planes concretos e integrales que demuestren que es un producto que sirve para vender.
Muchas gracias por el envío. Es un importante aporte. Leo bastante sobre podcast y monetización y cada vez más me voy formando la idea que son modelos poco aplicables a la Argentina. Veo canales y podcast de otros países y allí si parece funcionar la monetización, no asi en nuestro país.
Octavio, gracias por leer. No creas, en realidad en el mercado en español el modelo de monetización no tiene desarrollo. Es verdad que Argentina es un caso también particular por su situación económica, pero en países con estabilidad tampoco se ha generado un mercado.
El año pasado, en España, el podcast sólo generó €10 millones en todo el año, frente de los u$s2.400 millones que se generaron en EEUU.
Precisamente creemos que ya no se trata tanto de hablar de podcasting y todas sus bondades, su capacidad de prescripción, las comunidades... se trata de vender, de salir al mercado y demostrar que puede haber industria.
El riesgo de no hacerlo es que el podcasting quede como un producto pequeño, marginal y para románticos del audio. No se puede renunciar a la idea de sacar músculo, de presentar planes concretos e integrales que demuestren que es un producto que sirve para vender.